28 sept 2012

Capítulo 11: Un beso, un ángel y la verdad

Kyle elevó las alas y emprendió el vuelo. Yo iba agarrada a su torso, y Jem... bueno, él se fue corriendo hasta el lago. Nos elevamos del suelo con gracia y pronto estuvimos tocando las nubes. Me sentía libre y sin preocupaciones allí arriba. Esa sensación era totalmente nueva y diferente, pero me encantaba. Me hacía sentir viva y ligera como un pájaro. Me solté lentamente de Kyle, y sentada sobre su espalda, elevé los brazos al aire, deseando poder tocar el cielo con mis dedos. El viento agitaba mi cabello y el fresco aire, con sus dulces aromas, me acariciaba la cara. Era increíble estar allí arriba. Decidí extender un poco más los brazos. Solté una risilla porque el viento se colaba entre mis dedos. Kyle la oyó y giró la cabeza:
- ¡Isabella, te vas a matar!- Me distraje unas milésimas de segundo, y perdí el equilibrio, cayendo al vacío. La verdad es que cuando estás cayendo, normalmente te asustas y empiezas a patalear como una loca, intentando frenar la caída, pero esta vez era diferente. Esta vez, el viento y yo éramos lo mismo, compañeros, no enemigos. Una energía empezó a recorrerme el cuerpo poco a poco. Sí, esta vez lo sentía de verdad. Iba a ocurrir algo. Junté los brazos a mi cuerpo, y sentí que algo me cogía de la cintura. La energía se fue tan rápido como llegó. Ahogué un grito de euforia.
- Dios Kyle, ha sido increíble. Era, era... mágico.
- ¡Has estado a punto de matarte! ¿En qué estabas pensando?- Me gritó con la cara enrojecida debido al esfuerzo que le había supuesto cogerme.
- Yo... lo siento. No lo he hecho a propósito.
- Vámonos.- Sentenció.

Llegamos rápidamente al lago. Al parecer, no estábamos demasiado lejos.

Cuando bajamos, todos estaban allí, sentados al rededor de una manta a cuadros, y con unas cestas de picnic en su interior. A mi derecha, todo era bosque verde y frondoso. En medio estábamos nosotros, y a mi izquierda se extendía un lago hermoso de agua cristalina. Nunca dejaba de sorprenderme Mag.
Caminamos hacia el centro de la reunión, y Esmeralda, la chica pelirroja, corrió hacia mí.
- ¡¡Izzy!!- Me abrazó cariñosamente-. ¿Cómo estás? La última vez que te vi caías al suelo redonda.
Sonreí:
- Estoy bien. Muy bien, de hecho, ¿y tú?
- Genial. He aprendido un montón en estas dos semanas. Mira.- Dijo con un brillo en los ojos. Extendió los brazos hacia el frente y algunas de las runas que tenía tatuadas por todo el cuerpo, empezaron a brillar. Esme cerró las palmas de las manos y empezó a susurrar en un idioma extraño para mí. De ellas surgió un pequeño resplandor azul que cesó al momento. Ella abrió las palmas de las manos y de ellas salió una pequeña mariposa azul con rayas negras. Increíble.
- A que mola.- Me dijo. Le sonreí y fui a sentarme con los demás, seguida de Kyle, que miraba a la mariposa con curiosidad y asombro.
- Esme pronto será capaz de incluso crear agua. Las brujas no dejan de asombrarme.- Me susurró.
Me senté al lado de Henry, el gigante. Parecía feliz. Es más, todos parecían felices. Hasta Tommy, el centauro estaba sonriendo de oreja a oreja.
Empezamos a charlar, incluso Kyle. Se le veía relajado y cómodo en aquel sitio. De pronto, Jem me hizo una seña para que le siguiese. Me levanté y fui tras él. Nos internamos un poco en el bosque.
- ¿Qué pasa?- Le pregunté.
- Es que... tengo que decirte algo importante- He estado esperando mucho tiempo esperando este momento.



- Eh, ¿dónde está Izzy?- Preguntó Esmeralda-. Le hemos hecho un regalo.- Abrió su bolsita gris que pendía de su cinturón y sacó un guardapelo de plata.
- No lo sé, habrá ido a por algo. Voy a buscarla.- Dijo Kyle. Cogió el guardapelo y fue al bosque siguiendo el rastro de Isabella.

- Mira, Izzy, te quiero. Ya lo he dicho. Te lo iba a haber dicho en la fiesta que monté, pero pasó eso, y no pude. También te lo iba a haber dicho el día de la Transformación, pero te desmayaste. Parece que el destino no quería que te lo dijese, pero al fin lo he dicho. Te amo.- Dijo con un brillo de emoción en sus ojos rojos.
Me quedé petrificada. De haber sabido que me iba a decir eso no le hubiese seguido.
- Em... Jem, yo...
No me dejó terminar la frase. Me acercó a él contra mi voluntad, y me besó. Yo intenté resistirme, pero no me dejaba. Me estaba asfixiando y además me hacía daño en la espalda. Al final, le pisé en el pie para que me liberase. Me di la vuelta y vi la cara de Kyle, que había visto absolutamente todo. "Oh, no", pensé.
- ¡Kyle! ¡No!- Intenté gritarle pero ya elevaba el vuelo. Me giré y miré directamente a los ojos a Jem:
- ¡¡¿Pero a ti qué narices te pasa?!! ¡No te amo! ¡Has estado a punto de ahogarme desgraciado! - La verdad es que no quería decirle exactamente todo eso, pero exploté y lo tuve que soltar.
Una mirada de dolor cruzó la cara de Jem.
Fui corriendo a la explanada verde y busqué a Esme con la mirada.
- Lo sé todo- Dijo ella-. Un pájaro me lo acaba de contar, y no, no puedo teletransportarte. Aún no he aprendido ese hechizo. Lo siento.
- Pero tengo que hablar urgentemente con él.- Imploré.
- Espera, Izzy, yo te llevo.- Dij Tommy.
- ¿En serio? ¿Harías eso por mí?- Asintió. Me subí a su lomo, y empezó a correr a la velocidad del rayo.

Llegamos en un santiamén al torreón.
- Gracias Tommy, te debo una.
- No hay de qué. ¿Para qué estan los amigos?- Dijo él. "Para romper otras relaciones", pensé.
Subí las escaleras y me encontré a Marissa con una bandeja en las manos.
- Marissa, ¿has visto a Kyle? Necesito hablar con él ya.- Le pregunté.
- Lo siento Isabella, pero no. No le he visto desde que se fueron al lago.- Explicó.
Pensé en dónde podría estar. Miré en la biblioteca, en su habitación, en la cocina, pero nada. No había rastro de él. Entonces, una idea pasó por mi mente: El acantilado. Era el sitio preferido de Kyle, y estaba a cinco minutos del torreón. Corrí desesperada hacia ese lugar, como alma que lleva al diablo.
Las piedras del camino se me iban clavando en los pies, y las ramas de los árboles me iban haciendo pequeños cortes en los brazos. Pronto divisé la explanada del acantilado, verde y manchada de pequeños colores que le daban las flores. Y allí estaba él, sentado y con las alas caídas.
- ¡Kyle!- Grité. Él volvió la vista y me vio-. Kyle, no es lo que tú piensas. Jem me soltó que me quería y me cogió de la espalda. Me hacía mucho daño. Luego me besó, pero yo no quería, de verdad. Me resistí pero era mucho más fuerte que yo. Lo siento, perdóname.
- No hacía falta que me dieses todos los detalles.- Y me sonrió. Ese fue el gesto más bonito que me habían hecho nunca. Fue un bálsamo reparador.
- Oh, Kyle, gracias.
- ¿Sabes por qué te acogí?- Soltó de repente.
- Am, no, supongo.
- La noche en la que llegaste te oí cantar para tus amigos. Tienes una voz increíble, Isabella. Fue por eso, y porque sentía algo cuando te miraba. No sabría decirte el qué, pero supe que eras especial.
Desde que llegaste, soy mejor persona y eso es gracias a ti. Yo debería darte las gracias.
Me acerqué a él y me senté a su lado. Juntos contemplamos el cielo azul. Tan azul como el océano.
Kyle y yo nos miramos a los ojos. Sus ojos oscuros reflejaban pasión cuando me miraba. Cerré los ojos y ladeé la cabeza para besarle. Sentía que poco a poco la distancia entre nuestros labios iba disminuyendo.       Casi podía sentir los labios de Kyle sobre los míos.
- Vaya, vaya.- Dijo una voz a nuestras espaldas. Súbitamente, ambos nos levantamos. Era Claire, la hermana de Kyle. Su pelo negro se ondeaba al viento y sus mortíferas alas negras se imponían sobre su figura esbelta.
- Kyle, aléjate de ella.- Advirtió Claire.
- ¿Por qué?- Preguntó él.
- Por esto.- Claire se impulsó con las alas y me empujó con tal fuerza, que caí por el acantilado.
- ¡¡No!!- Gritó Kyle. Extendió las alas para volar, pero su hermana se lo impidió, agarrándole del nacimiento de las  alas, y por tanto, neutralizándole. No podía hacer nada.
- Tendría que haber hecho esto hace mucho tiempo. Ahora nadie se interpondrá entre tú y yo.- Sentenció.
Yo caía por el acantilado sin que pudiese evitarlo. No había nada a lo que agarrarse. Entonces, aquella sensación que tuve hace algunas horas, mientras caía al vacío, volvió. Aquella sensación de unión con el viento, de euforia. Esa sensación que me nació del corazón se extendió por todo mi cuerpo, llegando a las extremidades, pero sobre todo, a mi espalda, justo en los omóplatos. Un resplandor me invadió al instante y unas hermosas alas blancas aparecieron en mi espalda. Frené la caída justo a tiempo. Me mantuve en el aire durante unos instantes observando atónita las alas que me habían nacido de repente. Ascendí a toda velocidad y me encontré a Kyle tumbado en el suelo, mientras Claire le sujetaba el nacimiento de las alas.
- No, no puede ser.- Dijo Claire con rabia. Dejó de sujetar a su hermano y fue volando hasta mí.- ¿Es que nunca voy a poder acabar contigo? ¡Tendría que haberte matado cuando tuve ocasión!
- ¡Pero qué tienes contra mí!- Le grité.
- ¡¡Que no puedes separarnos a Kyle y a mí!! ¡Estamos hechos el uno para el otro!!- Me gritó con una rabia inhumana. Entonces, todo encajó. Ya sabía lo que hacer. Mi mano empezó a iluminarse y antes de que fuese demasiado tarde, toqué con ella a Claire. Ella gritó y cayó al suelo. Una intensa luz le recorría toda su silueta, y era incapaz de moverse.
Entonces, corrí hasta Kyle, que estaba impresionado por todo lo que acababa de ocurrir. Me acerqué a él, y le rodeé la cara con mis manos. Él me miró asombrado:
- Izzy... eres... un ángel...- Consiguió decir.
Me acerqué a él.
- ¡¡¡No!!!- Gritó Claire con rabia y angustia.
Le retiré el pelo negro de la frente y lentamente le besé. Fue un beso voraz, a la vez que apasionado y dulce. Algo en él se despertó, algo que había permanecido dormido durante mucho tiempo. Me separé de él con cuidado, y Kyle empezó a brillar.


LRA

9 comentarios:

  1. WOWOWOWOWOW COMO LO SABIA!!!! este Jem aaains que muchacho pero si esta clarisimo que acabaria con Kyle!!! bueno ante el amor poco se puede hacer pero un consejo: NUNCA BESES A UNA MUJER SIN PERMISO!!
    BESOS!!

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  2. pero que boniiitoooo. me ha encantado el capi y... quiero mas, quiero mas! :)

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  3. me a encantao este capitulo!! continua la historia :)

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    1. Gracias! Si tengo tiempo, este viernes subiré otro ^^

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  4. olaa, encontré tu blog y me encanta, me encantan las historias de ángeles!! te sigo,

    porfi pasate por mi blog:

    http://www.tobeornottobeesanoeslacuestion.blogspot.com.es/

    bss

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  5. Hola :)
    Encontre este blog buscando nuevas historias y la verdad esque me encanta, seguire tu historia cada viernes aunque sea desde el movil ;P
    Me encanta tu forma de escribir y por supuesto la novela.
    Besos <3

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  6. Hola :)
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    Me encanta tu forma de escribir y por supuesto la novela.
    Besos <3

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